sábado, 16 de marzo de 2024

Tiritas

Brazos para una mudanza.
Oídos para una desazón.
Tiritas para sangre seca.
Palabras para decir adiós.
 
Mensajes en mil madrugadas.
Silencios en clave de sol.
Recuerdos sin casi añoranza.
Consejos vacíos de ardor.
 
Remiendos lejos del desgarro.
Reversos de aquel resplandor.
Miradas huyendo del tiempo.
Olvidos huérfanos de rencor.

sábado, 9 de marzo de 2024

Soplos

Da pavor construir el camino antes que las huellas.
Cuesta imaginarse el resultado de una cuenta vacía.
Es complicado apostar por números que no se han sumado.
Resulta tortuoso esperar a aquello que no tiene forma.
 
Hasta que se abren las compuertas del ocaso siguiente
y comienza a llover la luz donde nadan las noches
para edificar con su ansia refugios en los que acurrucar
los soplos de aire que habíamos dado por perdidos.

domingo, 3 de marzo de 2024

Acarreo

En el acarreo donde se balancean los atardeceres
es inevitable perder algún jirón de olvido.
Los baches nunca duermen en colchones mullidos
y suelen resquebrajar algún suspiro en su caída.
 
Las transiciones siempre provocan algún mareo
incluso cuando no hemos visto venir las olas.
Su empuje nos devuelve contra las costas
en las que boquean esperanzas asfixiadas.
 
Dentro del movimiento hacia nuevos escenarios
resulta imposible poder frenar a tiempo.
Las encendidas marcas sobre la calzada
escriben el camino de los siguientes pasos.

domingo, 25 de febrero de 2024

Ladridos

Guardaré los pedazos de aquel recuerdo
dentro de la memoria de un ladrido
para poder volver a ellos cuando sienta
la necesidad de enfundarme las llamas
con las que barrer algunos pasados.
 
Ahorraré las ruinas de mil conversaciones
en la hucha que gotea permanentemente
y así lograr regar con desazones
las áridas furias de mi garganta
que se pasean derrochando arrepentimientos.

domingo, 18 de febrero de 2024

Sintaxis

Me ha hecho falta mucho dolor
para lograr comprender la sintaxis de los desprecios.
Han sido muchas huellas no descifradas
las que me han llevado a reconocer los abismos.
He tenido que escupir cientos de suspiros
hasta poder articular la hiel.
 
Harto de esconderme bajo lunas paliativas,
cansado de correr tras sombras de otra burla.
Me rebelo contra más futuros desteñidos,
me enfrento al reverso de la soledad.
Sé que me arriesgo a que el destino me noquee,
pero prefiero eso a dejar que me amordace.

domingo, 11 de febrero de 2024

Implorar

¿Cómo encontrar dioses a los que implorar
si estamos huérfanos de manos vacías?
¿Cómo aprender a poner cara de súplica
cuando el odio es nuestra única máscara?
¿Cómo arremeter contra esos demonios
a los que damos cobijo bajo nuestras penurias?
 
¿Cómo resistir a vendavales traicioneros
si estamos deseando que nos atropellen?
¿Cómo alimentar las fauces de la esperanza
cuando no hace más que devorar nuestra armadura?
¿Cómo eliminar todos esos pensamientos
a los que arrullamos sobre la cuna del miedo?

domingo, 4 de febrero de 2024

Lienzo

No puedes pintar un lienzo
con borbotones de hiel.
Nunca adquirirá el brillo
tras el que crees parapetarte.
Apenas servirá para lacerar
los recuerdos que pretendes sepultar.
 
No debes buscar banderas blancas
disparando las últimas balas.
Jamás encontrarás el camino
si te aferras a brújulas torcidas.
Solo alcanzarás una brizna de calma
cuando hayan huido las postillas.

sábado, 27 de enero de 2024

Lengua bífida

Siguiendo la pista
por el camino de los pasos hacia atrás
fui saludando a montones de espejos
cuyas aristas me acabaron guiando
a través de veredas inciertas.
 
Al final de la última sombra
encontré la verdad bifurcada
y me armé de valor para poder leer
la dirección del destino
tallada en su lengua bífida.

domingo, 21 de enero de 2024

Programación

Entre sueños en bucle,
esperanzas en condicional
y anhelos que cumplen con su función
la vida programa su código
con los métodos que vamos aprendiendo.
 
Hay que entender su lenguaje
procesando sus datos
para así poder desestructurar
la clausura en la que caemos
cuando no nos definimos.

domingo, 14 de enero de 2024

Arrogancia

Enfundarse la arrogancia
solo sirve como escudo
frente a aquellos enemigos
que brotan de las entrañas.
 
Jactarse de la ignorancia
solo vale para erguirse
ante esos ojos ciegos
que creen mirarlo todo.
 
Empaparse de petulancia
solo contribuye a hundirse
en las manos movedizas
de aplausos aduladores.